
- No necesito un antivirus. Muchas empresas consideran que no necesitan un antivirus porque no hacen ninguna actividad peligrosa en la red, porque consultan webs de garantías o que simplemente no tienen acceso a internet. Pero la realidad va más allá de eso, porque siempre existe el riesgo de que el ordenador se exponga a un virus, aunque sólo sea por instalar algo que se tenía en un pendrive o cd.
- Con guardar los archivos en un pendrive llega (o en dos si son muchos). Hay personas que, ante el miedo de que sus archivos puedan desaparecer al estropearse el ordenador o por cualquier otra cosa, consideran la posibilidad de hacer copias de seguridad. Y piensan que con un pendrive les llega, pero la realidad no es así, porque éste se puede estropear o perder o lo que sea. Y con los cds o dvds aún es peor. Lo mejor es combinar pendrive con almacenamiento seguro en la nube o disco duro externo (más seguro y duradero) con almacenamiento en la nube.
- Mi empresa es pequeña, nadie querrá hacerle daño. Aunque consideres que nadie se fija en ti o que nadie te conoce, corres el riesgo igualmente de que alguien quiera hacerte daño, infectar tu ordenador o acceder a tus datos, incluso sin si quiera conocerte porque hay muchos peligros en la red.
- Puedo abrir los adjuntos de personas de confianza porque las conozco y no me van a hacer ningún mal. Aunque la persona sea de confianza, es posible que alguno de los archivos se encuentre infectado y te afecte a ti también por su desconocimiento, descuido o porque alguien le ha infectado anteriormente. Hay que comprobar muy bien lo que se abre y lo que se instala en el ordenador, incluso aunque quien lo envíe sea de confianza.
- No guardo nada en la nube porque no es real e insegura. Aunque tú no la veas, la nube existe, es real, tiene espacio físico. Además, aunque los peligros existen en todos sitios, las empresas que ofrecen servicios de almacenamiento en la nube se preocupan mucho de la seguridad e implementan los mejores sistemas para mantener los datos seguros.
- Los virus los crean las empresas de virus, así que comprar un antivirus es animarlos a que creen más nuevos virus. Lo que hay que hacer es que nadie los compre para que la red se encuentre segura. Lo cierto es que los virus los puede hacer cualquier persona que tenga conocimientos: alguien que se aburre, alguien que quiere ganar dinero fácil, alguien a quien le gusta hacer mal, etc. Y lo peor de todo es que se propagan por la red aunque muchos de quienes lo propagan no lo saben.
- Mi ordenador funciona bien. No está infectado, no tiene virus, yo lo veo como siempre. Es posible que un ordenador se encuentre infectado y no lo sepamos, bien porque no percibamos su lentitud como algo extraño o que simplemente esté utilizando nuestros datos o que haga cosas extrañas a las que no le damos importancia. Que un ordenador se encienda y funcione no quiere decir que lo haga bien.
- El sentido común y la precaución son mucho mejor que mil antivirus, así que no necesito antivirus. Lo cierto es que por muchas precauciones que tomes el riesgo existe. Somos humanos y no somos perfectos, como tampoco lo son las máquinas, así que debemos complementarnos bien.
- Con un buen antivirus mi empresa está segura, así que no tengo que preocuparme. En primer lugar, hay que tener precaución igualmente, y por la otra los antivirus no solucionan todos los problemas que pueden darse lugar en el ordenador de la empresa. Muchas de ellas requieren otros sistemas de seguridad como un buen cortafuegos o firewall.
- Si tengo algún problema, hago una restauración de Windows o formateo el ordenador y listo. Aunque esta es una solución que se aplica en algunos casos drásticos, siempre que sea posible, no es la solución que se debe utilizar en primera instancia ni la solución a todos los problemas. A veces ni si quiera eso soluciona el problema.