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Antes de comprar un negocio, mejor es investigar

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En el mundo de los negocios actuales, aquellos que desean invertir en una empresa pero carecen de la idea inicial que posibilita la creación de una nueva compañía, una alternativa realmente interesante es optar por la compra de un negocio ya establecido. Tengamos en cuenta que en este tipo de casos el mayor esfuerzo para concertar la organización y gran parte de las bases para alcanzar el éxito son caminos que ya han sido recorridos por los propietarios anteriores. Claro que si estamos a punto de dar un paso tan importante como lo es la compra de una empresa establecida, antes de concretar nuestra oferta con el vendedor debemos llevar a cabo una investigación y evaluación de diferentes aspectos del negocio en cuestión, para evitar ser estafados. Por supuesto que en la mayoría de los casos deberemos firmar un acuerdo de confidencialidad al dueño de la empresa, para que este nos dé acceso a la información sensible y detallada de la compañía. Es por ello que muchas veces se recomienda contar con el asesoramiento de profesionales en la materia, como contadores, abogados, tasadores, agentes de transmisión de empresas, intermediarios comerciales y financieros corporativos, que pueden brindarnos una gran ayuda. Lo cierto es que una vez que hayamos encontrado el negocio que deseamos comprar, en primer lugar deberemos saber con exactitud qué partes de la empresa están a la venta, o bien decidir cuáles son las partes que nos interesa comprar. Tengamos en cuenta que no siempre se trata de adquirir la empresa en su totalidad, ya que también podemos optar por comprar sólo sus activos. Si ese es el caso, tendremos que acordar con el vendedor si se establece o no una compensación cuando existen pérdida de beneficios fiscales, por ejemplo debido a la venta de acciones. De todas formas, independientemente de si queremos comprar la compañía en su totalidad o sólo sus activos, lo primero que debemos hacer es investigar y comprobar una serie de elementos fundamentales dentro de la compañía. Antes de dar el gran paso debemos comprobar lo siguiente:

  • Que la empresa posee la plena propiedad legal de los activos claves, tales como instalaciones, equipos y materiales, para lo cual debemos solicitar la documentación que prueba todos los equipos y materiales han sido comprados y pagados en su totalidad.
  • Que el negocio cuenta con las garantías de los todos los equipos, tales como computadoras, fotocopiadoras y vehículos, entre otros.
  • Que la empresa tiene registrados y protegidos sus productos y servicios en las normas de propiedad intelectual de cada país, y que posee las patentes pertinentes.
  • Conocer los contratos con los proveedores y clientes de la empresa, para saber cuáles son los requerimientos legales al respecto.

Por supuesto que esto no es todo, ya que seguramente deberemos comprobar algunos aspectos más antes de adquirir un negocio establecido, para lo cual es conveniente contar con el asesoramiento de profesionales, que poseen experiencia en la valoración de las empresas y sus activos. Claro está que también depende de nosotros, ya que siempre es conveniente que ante la posible concreción de la compra de un negocio les preguntemos a los vendedores todo lo que deseamos saber. Jamás debemos quedarnos con dudas. En este sentido, además de comprobar el estado de los activos de la compañía, es fundamental revisar los aspectos legales y financieros, teniendo en cuenta lo que se detalla a continuación:

  • Comprobar que el vendedor posee los derechos legales de vender el negocio, ya que en muchos casos puede tratarse de una empresa creada sobre la base de una sociedad, por lo que puede haber más de un propietario involucrado.
  • Solicitar el Plan de Negocios original, ya que en este documento podremos revisar cuestiones relacionadas a la financiación de la puesta en marcha, y al mismo tiempo saber si existen préstamos con pagos pendientes.
  • Ver las cuentas del negocio, incluyendo todos los detalles de la gestión, los balances, las deudas, los préstamos pendientes y demás, para conocer los detalles financieros de la empresa.
  • Comprobar que la empresa posee la propiedad legal de los activos claves y los términos de los mismos, como por ejemplo solicitando escrituras o contratos de alquiler de locales.
  • Consultar con el fideicomiso para conocer los detalles de los posibles casos judiciales que estén en marcha, tanto contra la empresa como a favor de ella, para saber si esto puede llegar a afectar nuestras finanzas o nuestra reputación.
  • Solicitar información acerca de los empleados actuales del negocio, como así también en lo referente a los sistemas de información (TI) y otras tecnologías, y cuestiones relacionadas con el medio ambiente.

En definitiva, lo cierto es que cuando el propietario de una empresa está dispuesto a vender, se supone entonces que debería colaborar plenamente, ofreciéndonos acceso a toda la información necesaria. De lo contrario, si nos encontramos con un vendedor reticente a brindarnos detalles fundamentales del estado actual del negocio, lo mínimo que podemos hacer es dudar. Y la duda muchas veces es el mejor camino para alcanzar las respuestas. Por ello, antes de efectuar la compra de una compañía establecida, debemos poder obtener las respuestas a todas nuestras inquietudes, y asegurarnos de la veracidad de la información.