
A día de hoy es difícil de creer que hace pocas décadas el marketing no era muy utilizado como herramienta para los negocios, y es que poco a poco y a lo largo del tiempo las empresas han descubierto que la aplicación del marketing ofrece beneficios a corto, medio y largo plazo. Este cambio de mentalidad con respecto a la aplicación del marketing ha hecho que ahora las empresas vean el marketing como una herramienta para su negocio, y no como un gasto innecesario o un lujo. Invertir en marketing es invertir en el negocio, ya se persigan fines económicos o no. El marketing puede dar a conocer una empresa o un negocio, mayor reconocimiento a la marca, ayuda a ganar o fidelizar clientes, ayuda a conocerlos e identificarlos, ofrece unas mayores ganancias e información sobre los clientes. Además, se puede conseguir un ahorro de tiempo y dinero. Parece difícil de creer ¿no? Pues no, el marketing tiene muchos beneficios. A continuación mencionaremos cuales son los ámbitos de aplicación del marketing en donde además se presentarán los objetivos de cada uno de ellos. Marketing Comercial Es el marketing que trabaja en beneficio de la venta de los productos o servicios con el fin de obtener un beneficio económico de ello. Busca incitar al consumo a corto plazo. Es quizá el tipo de marketing más utilizado y conocido, de hecho en muchas ocasiones cuando se habla de marketing se está refiriendo al marketing comercial. Marketing social Pretende incrementar la aceptación social y se caracteriza por ser agente de cambio social voluntario. Es el tipo de marketing que se basa en la utilización de la segmentación de mercados, la investigación de los consumidores, de la comunicación, entre otros factores. Es un estilo de marketing que pretende incrementar la aceptación social, y no persigue fines económicos, sólo atiende a segmentos de la población. Se dirige a pautas de comportamiento, valores o estilos de vida dentro de la sociedad a medio o largo plazo. Una de sus principales características es que no se puede medir de forma objetiva porque tiene unos resultados intangibles. Se puede aplicar al: Marketing en organismos sin fines de lucro, marketing de causa social, marketing al servicio de la administración de los servicios públicos. Marketing social corporativo Con este tipo de marketing se pretende lograr el compromiso de los consumidores que cuentan un determinado interés social, sobre todo buscando mejorar la imagen o posición de la empresa en el mercado. Pueden ser: Marketing político: aquel que permite la promoción de los distintos partidos políticos y sus candidatos. Marketing social: en donde su objetivo es servir a los intereses del mercado sin búsqueda de obtener algún beneficio económico o personal, aunque es cierto que sí ayuda a mejorar la imagen de la empresa. Sobre este tipo de marketing hemos hablado anteriormente. El marketing empresarial engloba las estrategias que adoptan las empresas que buscan alcanzar el máximo beneficio a cambio de una prestación que satisfaga las necesidades del cliente, pudiendo ser aplicadas a productos de consumo, de servicios o de carácter industrial. El marketing aplicado a los productos de consumo se da en las empresas que comercializan productos tangibles, los cuales están sometidos a una fuerte competencia. El marketing de servicios trata de comercializar los servicios, siendo cada vez mayor en las economías desarrolladas en donde es conveniente una aplicación específica debido a la intangibilidad de del producto. El marketing relacionado con la industria presenta la comercialización de bienes tangibles que se destinan al consumo por parte de empresas que los utilizan como materia prima para la elaboración de otros productos. El marketing que no es empresarial se da en las organizaciones que no tienen ánimo de lucro. El marketing público es practicado por las instituciones públicas. El marketing social promueve la idea social como son las campañas para dejar de fumar, entre muchas otras. Todos los tipos de marketing tienen una aplicación bien definida, buscan un objetivo concreto, algunos persiguen fines económicos y otros buscan algo distinto.