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Auditoria Social de las Organizaciones

En materia de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) existen diversas directrices o ejes, que permiten y hacen posible dirigir las actividades de la organización, que a su vez, permiten establecer indicadores de cumplimiento. Los conceptos que conforman la filosofía de la RSC son más amplios de lo que generalmente se conoce. La promoción que se ha venido realizando a través de varias décadas, desgraciadamente se ha concentrado únicamente en promover de manera muy general el sentido ambiental y social de la RSC, omitiendo casi por completo otros conceptos fundamentales que forman parte integrante de dicha filosofía, como es el caso de la medición de la Responsabilidad Social Corporativa. Existe un precepto en el lenguaje administrativo y financiero que dice: “No podemos mejorar lo que no controlamos” “No podemos controlar lo que no medimos” “No podemos medir lo que no está identificado” Exactamente esa situación, es lo que sucede con los lineamientos acerca de la RSC. ¿Cómo se puede mejorar la aplicación de la RSC sino existe un control? ¿Cómo podemos controlar la certeza y veracidad de la aplicación de la RSC sino está medido su desempeño? ¿Cómo podemos medir el correcto desempeño sino están identificados y son conocidos públicamente sus lineamientos? Cuestionamientos algo severos, para tantas empresas que han centrado sus esfuerzos en un par de actividades sociales, que difunden al parecer como estrategia de mercadeo. Dentro de los lineamientos que se han comentado, existe lo referente a la Auditoria Social, proceso que permite determinar si una empresa es verídicamente socialmente responsable, dicho lineamiento contempla varios procesos, en esta ocasión únicamente se hará una breve referencia al “Balance Social”, instrumento que permite evaluar de manera consistente el comportamiento ético de la empresa y su comunicación en el entorno social. Algunas de las grandes corporaciones, presentan anualmente su Balance Social, de manera que pueda ser evaluado cuantitativa y cualitativamente el cumplimiento de los compromisos sociales adquiridos voluntariamente ante la comunidad, cabe la aclaración, que dicho balance es un proceso que no ha sido evaluado de manera externa, pero que sin duda alguna, es una evidente muestra de transparencia  y buena voluntad, carente en el grueso de las empresas, que solo limitan sus acciones en materia de RSC, a la realización de algunas actividades, omitiendo cumplir con todas las directrices establecidas en la multicitada filosofía. Los aspectos valorados en un Balance Social, contemplan entre otros conceptos los siguientes:

  • Derechos humanos
  • Derechos de los empleados
  • Protección del medio ambiente
  • Relación con el entorno social
  • Relación con los suministradores
  • Derechos de los stakeholders o partes relacionadas.
  • Otros aspectos.

Se puede apreciar, que las pautas que involucra asumir voluntariamente la RSC, son algo mucho más complejo de lo que suele considerarse, razón por la cual posiblemente algunos críticos tildan a la RSC de una simple estrategia de mercadeo, que en gran medida, también ha adquirido el pseudónimo de moda.