Cada vez son más los empresarios y trabajadores freelance que cada día se preguntan si están llevando una gestión económica eficiente y adecuada en su negocio o empresa. Existen multitud de variables y factores que pueden influir de forma negativa o bien positivamente a la hora de valorar nuestra actuación frente a una gestión de tipo económico. Las principales herramientas y características a tener en cuenta, disponibles en la empresas o negocios, y más concretamente en los departamentos administrativos-financieros. En primer lugar se deben poner los ojos sobre el cierre contable mensual, un cierre mensual totalmente completo, sin duda alguna una herramienta indispensable a la hora de gestionar cualquier tipo de negocio. Es importante saber cómo ha ido el mes para poder tomar las decisiones oportunas y poder así corregir las actitudes incorrectas de cara a la gestión empresarial. Por otro lado, tampoco podemos olvidarnos de tener muy presente el presupuesto anual de ingresos y gastos con los que cuenta la empresa. Y es que dependiendo del presupuesto con el que podamos contar, tendremos que cuantificar nuestros objetivos así como conocer el margen de maniobra con el contamos. De este modo se podrá comunicar a todo el equipo de nuestra empresa los objetivos y límites a cumplir en cuanto a una gestión económica eficiente. Otro de los puntos clave a tratar es el presupuesto y posición de tesorería, de tal modo que es indispensable conocer de forma anticipada y detalladamente cuales son las necesidades a corto y largo plazo de la tesorería, permitiéndonos así prever las posibles tensiones, evitarlas y gestionar eficazmente las posibles puntas de tesorería. El departamento financiero de nuestra empresa deberá encargarse de asegurar una gestión de los recursos económicos de forma razonable, tanto a la hora de realizar los proyectos que la empresa tenga en mente así como a la hora de llevar a cabo la gestión habitual diaria. Evidentemente eso incluye la obtención de ayudas y subvenciones públicas, negociar con las entidades bancarias de una manera estratégica o bien preparar la empresas para conseguir llegar hasta los inversores privados, entre otras posibilidades. Cumplir la normativa mercantil y fiscal es otro de los puntos a tener muy en cuenta, ya que un incumplimiento de las reglas de nuestro sistema económico puede conllevar duras sanciones, así como dañar la imagen de la empresa considerablemente de cara al mercado. Por ello, presentar los impuestos correctamente y pagarlos en plazo oportuno, así como depositar las cuentas anuales en tiempo, son prácticas que no podemos pasar por alto de ninguna de las maneras. Por último, pero no menos importantes, también debemos hacer hincapié en puntos tan relevantes como la formación continua del personal de nuestra empresa, mejorar de forma continuada los soportes informáticos de nuestra empresa (indispensable para una gestión inteligente), llevar a cabo una excelente administración asegurando el ideal control interno, así como contar con un archivo eficiente, uno de los principales indicadores más claros de que se está llevando una gestión economía eficiente de la empresa.