
Ser cliente no supone ser un buen cliente como ser un vendedor no supone ser un buen vendedor. No es un buen cliente el que más compra o más beneficios ofrece a la empresa sino que tiene que reunir más cualidades. ¿Quieres saber cuáles?
- Un buen cliente sabe lo que quiere y sabe cómo expresar exactamente lo que quiere, no es impreciso ni se deja cosas en el tintero, es capaz de indicar con precisión lo que necesita.
- Un buen cliente es el que crea un buen ambiente cuando entra en el negocio, aquel que lleva una sonrisa y no mal rollo.
- Un buen cliente tiene una actitud positiva, actitud que contagia en el ambiente y ofrece un mejor humor en la empresa.
- Un buen cliente tiene buenos modales y está sujeto a las normas de cortesía, sabe cómo tratar a las demás personas y lo hace. No pierde las formas incluso ante los problemas que suceden, sabe cómo manejar la situación.
- No cree que siempre llega la razón, sabe escuchar a los demás y es capaz de mirar la perspectiva de las otras personas y de quien le vende algo.
- Las reclamaciones las hace de forma adecuada, sin insultar ni denigrar, expresa la situación que está sucediendo de forma adecuada y ofrece la posibilidad de darle soluciones o alternativas, incluso puede proponer sus alternativas. Además, busca las formas de ofrecer las quejas por los medios que existen a su disposición. Un buen cliente sabe que no conoce todo, que quizá las cosas lleven más tiempo de lo que se piensa y que hay determinados tiempos o trámites para hacer algunas cosas. Un buen cliente no es impaciente.
- Un buen cliente es agradecido, sabe que no por pagar tiene derecho a todo y que es el centro del mundo. Un buen cliente agradece la buena atención y el buen servicio o producto.
- Un buen cliente no espera que le den más de lo que ha pedido por el mismo precio, no espera que le ofrezcan un mayor servicio, un mayor producto o un mayor trabajo sin pagar a mayores.
- Un buen cliente paga en su debido tiempo, no se demora en los pagos ni intenta evitar la situación. Cada cosa tiene un precio y eso debe pagarse lo antes posible.
- Y por supuesto, un buen cliente es capaz de creer en lo que compra y en la empresa a quien compra, porque sino está fallando lo más básico. La confianza es una de las primeras premisas del cliente que quieren todas las empresas.
Y tú ¿te consideras buen cliente, sabes reconocer a los buenos clientes, crees que un buen cliente es sólo aquel que paga lo que le piden? ¿Qué piensas al respecto?