A la hora de buscar implementar un programa de medición del rendimiento hay que prepararlo todo, ya que va a ser un paso muy importante de cara a sacar el mayor provecho a los trabajadores de la empresa. Lo primero que hay que hacer es definir objetivos, establecer metas, criterios de mejora y resultados que se espera. Hay que planificar los procedimientos que se van a utilizar para hacer las evaluaciones de rendimiento y establecer las responsabilidades de cara a las actividades. Una vez que se ha definido todo esto, se debe comunicar al personal de la empresa los objetivos que se pretenden llevar a cabo y los beneficios que esto supone a la empresa. La comunicación es una parte muy importante de cara a llevar a cabo un programa de medición del rendimiento. Una vez hecho esto, se nombra a las personas que van a llevar las valoraciones de rendimiento para la empresa. Una vez hecho esto, hay que dar a conocer los criterios de valoración que se van a tener en cuenta, no sin antes haber pensado cuáles son, y el peso de cada uno de ellos en la valoración final. Qué es lo que se quiere valorar y qué es lo que vale cada aspecto de la valoración. Una vez que se ha analizado y comunicado esta postura, hay que dar con las herramientas que son necesarias para conseguir la información que se necesita. En ocasiones una entrevista puede ser la mayor de las herramientas, pero hay que analizar qué es lo que se va a necesitar para la valoración del rendimiento. Una vez llevado a cabo este proceso y realizada la valoración, hay que tener un reporte periódico de las valoraciones realizadas, los resultados y las calificaciones que se han conseguido de los trabajadores, departamento o puesto a estudiar, dependiendo en qué se enfoque el estudio. Es muy importante que se cree una política que determine qué pasa con cada una de las calificaciones, tanto si son bajas como si son altas, se puede establecer una política de compensaciones por valoraciones positivas que satisfagan a la empresa, ya que calificaciones positivas significan que la empresa va mejor ya que los trabajadores cumplen eficientemente con su trabajo. La comunicación es muy importante, ya lo hemos dicho, por lo que va a ser importante comunicar los resultados de cara a favorecer la mejora en la empresa. Los casos de éxito deben comunicarse, y hacerlo con énfasis, así como los premios por este aspecto. Un paso importante para que todo el proceso sea exitoso es medir el impacto que esto supone para la empresa y los trabajadores, conocer los resultados que se obtienen de estas medidas de cara a ver si se va por buen camino.