Generalmente se necesitará presentar un proyecto en pocos minutos si se trata de elevador pitch, que es una presentación de un negocio, idea o proyecto en pocos minutos, pensada para hacer en cualquier momento, y de ello surgió de la necesidad de hacer presentaciones en los pocos tiempos que algunos inversores tenían, ya sea de camino a un sitio o en un ascensor. Como nunca sabemos cuándo tendremos la oportunidad o necesidad de presentar la empresa a otra persona, es necesario prepararse para ello y contar con una presentación que se puede hacer en no más de 2 minutos.
- Empieza por lo básico, ya que es lo primero que la otra persona va a escuchar. Si no se cuenta lo básico se corre lo riesgo de que no llegue a ser escuchado.
- Responde a las preguntas más necesarias, como quién eres, qué haces, qué experiencia tienes o qué necesitas
- Muestra el producto. No basta con que digas de qué va ni cómo funciona ni enseñes una imagen de él, muéstralo, deja que la otra persona lo conozca.
- Sé concreto/a y breve, di sólo que se requiere decir sin nada más. 2 minutos no dan para mucho más.
- Descubre el problema y dale una solución. Los productos o servicios buscan dar soluciones a problemas, más que tener mil características que no sirven de nada, por eso mismo hay que saber plasmárselo a la otra persona demostrando que sirve para algo.
- Muestra cifras, pero poco detalladas, despertando interés de la otra persona en saber más sobre ellas o cómo se pueden captar, y sobre todo hay cosas más importantes de las que hablar que sólo cifras.
- Define el valor agregado de tu proyecto en el mercado, qué es lo que aporta que no hacen los demás.
- Utiliza la imaginación. Una presentación aburrida y sin esencia puede caer en saco roto, utiliza la imaginación para hacerla más amena y efectiva.
- Ten pasión y contágiala. ¿Quién va a interesarse en un proyecto por el que no hay pasión o que se espera de quien no sabe contagiar esa pasión?
- Céntrate en lo que quieres conseguir, que sobre todo es captar la atención de la otra persona haciendo que tenga interés de conocer más después.
- Investiga, intenta conocer a los potenciales inversores o personas interesadas, porque así sabrás qué darles y cómo llegar a ellos con tu discurso.
- Repite lo más importante, hazlo también al final para que quede en la mente de la otra persona.
- El mensaje ha de ser directo, claro y preciso.
- Aprovecha tu oportunidad, y si no llega intenta crearla, pero sobre todo no “seas pesado/a”, hay que saber cuándo parar y aprender a dejar con ganas de más, sin mostrar desesperación. Tú eres quien da la oportunidad, no quien la recibe, ten eso en mente.