
En ocasiones es necesario proponer un nuevo puesto en la empresa porque los que existen no son lo suficientemente especializados para hacer tareas que se necesitan o que surgen por alguna nueva actividad de la empresa. A veces se identifican necesidades de áreas o nuevas áreas en la empresa, lo que incide en la necesidad de un nuevo puesto, pero no basta con descubrirlo, hay que proponerlo mostrando a la empresa que es realmente necesario. Para empezar a proponer un nuevo puesto, se necesita determinar qué es lo que necesita la empresa para el área, teniendo en cuenta la cantidad de dinero que se va a requerir. Se ha de comparar la diferencia entre el salario que recibiría esta persona y lo que se está gastando en el sueldo de las personas el tiempo que realizan estas tareas que podrían ser cubiertas por una persona especializada. También se debe tener en cuenta que en muchas ocasiones la especialización consigue un importante ahorro de tiempo, incluso en las mismas tareas, y una mejor realización del trabajo. Una vez que se han hecho los cálculos, se debe hacer una descripción del trabajo que se debería realizar en el puesto. Se debe tener en cuenta las tareas, las necesidades, las cualidades y habilidades requeridas, la formación y todo lo que se necesita. Se debe adaptar de cara a la nueva oferta de trabajo que se podría realizar. En caso de que lo que se proponga es un puesto que se quiere ocupar también hay que pensar en quién realizaría el puesto que se está ocupando en la actualidad además de los beneficios que supone este cambio de puesto para la empresa. Todo ello sin menospreciar el propio trabajo, sobre todo por las cosas no salen como se esperaba, siempre indicando lo bueno del nuevo puesto y no lo malo del actual. Con todo esto se ha de hacer una propuesta formal. Puede ser una buena idea conseguir que otras personas se impliquen y ayuden a que se cumpla lo que se propone. Para ello se pueden pedir opiniones, hacer sondeos y establecer contactos para darles a conocer lo bueno de este nuevo puesto. La propuesta formal ha de ser breve, con todos los argumentos más importantes y teniendo en cuenta cifras económicas. Uno de los aspectos que hay que plantearse más con respecto a proponer un nuevo puesto es si realmente es necesario y si se puede asumir el coste de este nuevo puesto, teniendo en cuenta los gastos que supone pero también los beneficios que podría aportar su existencia. ¿A la larga beneficia que haya este nuevo puesto de trabajo?