
Planificar las reuniones Las reuniones mejor deben ser por la mañana, de 10 de la mañana a 4 de la tarde, pero es mucho mejor evitar la hora de la comida y los viernes por la tarde. Se debe comprobar que se habla con la persona correcta por teléfono y fijar una reunión, también se puede confirmar y recordar por email. Las citas deben planificarse con suficiente antelación, al menos unas semanas. No se ha de cancelar una cita a no ser que sea por algo muy importante o de fuerza mayor. No suelen hacer comidas de negocios, así que esto sólo se debe hacer en caso de que haya mucha confianza. Si se invita a una cena privada se debe llevar regalo, en cualquier otra reunión no. Si se está en el propio país y la otra persona invita a la comida, puede ser bueno ofrecer mostrarle el país para devolver la invitación. En la primera reunión Son muy prácticos, así que lo habitual es que queden claros los aspectos de un acuerdo en la primera reunión no siendo necesarias más, por eso mismo se debe dar con la persona correcta para la negociación. A la hora de negociar con alemanes, es necesario llegar a la reunión puntual, incluso se puede planificar para llegar unos minutos antes, pero sobre todo hay que tener en cuenta el tiempo y transporte para evitar imprevistos de última hora. Los alemanes son muy puntuales, así que hay que serlo también. En cuanto a la forma de vestir para los negocios, es recomendable llevar traje con corbata si se es hombre y traje de chaqueta si se es mujer. Aunque actualmente no hay tantas formalidades es mucho mejor vestir formal que no hacerlo. Se recomienda utilizar el idioma alemán si se conoce, es muy importante conocer alemán en la medida de lo posible, pero si no se conoce lo mejor es contratar un intérprete o hablar inglés. Para presentarse se debe decir “Señor Título Apellido”, siempre bajo el tratamiento de usted y dando mucha importancia al título universitario. Se ha de recibir con un buen apretón de manos. Al presentarse se puede intercambiar de forma rápida tarjetas de visita, que ha de estar en inglés. No hay que halagarle ya que, lejos de ser beneficioso, puede chocarles. A lo largo de la reunión, hay que mantener una distancia prudencial y sentimental ya que no les gusta que invadan su espacio personal. Los alemanes van al grano, por lo que comentarán un poco al inicio sobre el viaje pero inmediatamente se hablará sobre negocios. Esperarán una buena documentación y respuestas informativas con buenos argumentos, por eso mismo hay que preparar muy bien la reunión antes de asistir a ella e ir muy preparados. Los primeros encuentros no durarán más de una hora. Si hay algún problema, lo analizan bien y buscan posibles soluciones, son muy prácticos. Al finalizar la reunión, hay que dar las gracias al interlocutor. A qué le dan más importancia los alemanes La opinión de especialistas invitados a la reunión tendrá mucha importancia, más que la jerarquía. Hay que tener en cuenta además que la calidad será lo que prime, más que el propio precio, prestando especial atención a que se cumplen todas las normas necesarias. La palabra es clave, así que no se debe prometer lo que no se va a ofrecer, son muy serios en los negocios así que tampoco es bueno gastar bromas ni ironías. Prestan mucha importancia a los plazos de pago, prefieren pagos cortos, con una media de 30 días. No todos, pero algunos pueden tener recelo de mujeres en puestos importantes.