Ser distribuidor independiente supone ser el propio jefe, aunque en realidad se trata de un término que se utiliza mucho en los negocios multinivel en los que se promociona determinados productos de algunas empresas e incluso se quiere dar a conocer a otras personas el negocio existente. Es crear un propio negocio, pero es mucho más que eso. Para ser un buen distribuidor independiente hay que:
- Tener una agenda ordenada
- Tener una mentalidad positiva
- Organizar los tiempos de trabajo respetándolos en todo momento, intentando crear rutinas realistas
- Llevar un cuaderno contable en que aparezcan los gastos y las ganancias de la actividad, teniendo en cuenta si alguien debe algo
- Hay que tener una mentalidad de líder
- Hay que tener una buena mentalidad de cara a las ventas, tener actitudes para vender y formarse en nuevas técnicas de ventas
- Se debe intentar descubrir cómo sacar el máximo provecho de los productos que se van a promocionar para así saber cómo enfocarlos a la persona que va a comprar, saber detectar necesidades fácilmente para poder cubrirlas
- Hay que informarse a fondo sobre el mercado, el producto, los potenciales clientes, la historia y todo lo relacionado con el negocio en que se adentra
- Hay que hacer las cosas bien, y esto supone, aunque pocos lo digan, legalizar la situación y pagar los impuestos que correspondan (ver trámites que hay que realizar para ser autónomo en España)
- Hay que buscar la mejora continua, siempre se puede mejorar algo por muy bien que vayan las cosas, o por muy mal que vayan
- Hay que tener ganas de trabajar, tener entusiasmo en el trabajo
- La motivación es un aspecto clave de este negocio
- Se recomienda intentar introducir a nuevas personas en el negocio, para complementar los beneficios de venta con los beneficios por atraer a esas personas
- La paciencia y constancia son claves, a veces se puede pasar días sin conseguir ni una sola venta y en otras ocasiones se pude conseguir grandes ventas. Hay que saber esperar y saber que pronto se compensarán los malos momentos
MUY IMPORTANTE No serás un buen distribuidor independiente si no tienes cualidades de vendedor y además has entrado en el negocio por desesperación, porque te han dicho que serás tu propio jefe y ganarás grandes cantidades de dinero en poco tiempo. Si no tienes la capacidad de movilizar a otras personas para que confíen en el negocio y ni si quiera sabes diferenciar quién vale para ello y quién no. En muchas ocasiones se intenta convencer a todo el mundo de que puede ser un buen distribuidor independiente, y esto no es cierto, no lo es a menos que se tenga la mentalidad de trabajar de cara a objetivos que en ocasiones no son sencillos, si no se tiene paciencia, constancia y una mentalidad positiva.