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Cuándo se utiliza cada tipo de remuneración

Pautas para fijar las remuneraciones

A la hora de valorar cuándo se utiliza cada tipo de remuneración hay que tener en cuenta los tipos de retribución existentes y los objetivos que pretende alcanzar la empresa con la contratación de trabajadores. Además, hay que tener en cuenta las características de la empresa, no puede ofrecer lo mismo una empresa grande que una pequeña, una empresa de un sector que del otro, etc. Por eso, vamos a dar una serie de parámetros de qué tipo de empresas o en qué empresas se suele utilizar cada tipo de remuneración, teniendo en cuenta también en qué consiste la retribución existente:

  • La retribución por tiempo se basa en las horas de trabajo que se pasan en la empresa, teniendo en cuenta un sueldo base o de convenio e que el trabajador cobra por los días o horas que se trabaja en la empresa. Es la forma de pago que más se utiliza en todo tipo de empresas, ya que es muy fácil de calcular.
  • La retribución por antigüedad se  basa en que las empresas pagan en  base a la permanencia en la empresa. Este tipo de remuneración lo utilizan empresas públicas o empresas que quieren premiar la fidelidad a la empresa, así como empresas que pretenden sostener a los talentos por medio de la capacidad económica.
  • Remuneración por comisiones es un tipo de remuneración en que se paga al trabajador en función al rendimiento o objetivos conseguidos que se ha planteado la empresa. Se puede utilizar como un método complementario de sueldo fijo o como remuneración única, siendo en este último caso en que se paga al trabajador sólo en función de su rendimiento y objetivos alcanzados. Se suele utilizar en empresas que requieren alcanzar objetivos, sobre todo en trabajos de comerciales y vendedores. En este tipo de remuneración se requieren personas ambiciosas que creen en su valía en el puesto y quieren ganar más dinero del que un sueldo fijo les ofrecería.
  • La retribución por aptitudes es un método de remuneración que se utiliza para pagar al trabajador en función de sus capacidades, de lo que son capaces de hacer, no sólo de lo que requiere la empresa sino de lo que por sí pueden hacer. Tiene en cuenta destrezas, conocimientos y habilidades, aunque estas no sean necesarias en el puesto. Es un tipo de remuneración que se suele utilizar en puestos como los de I+D, finanzas, abogados, secretariados.

Como hemos podido comprobar, la mayoría de las empresas utilizan la retribución por tiempo, ya que es la más fácil de calcular y la más habitual. La retribución por comisiones lo utilizan la mayoría de las empresas que requieren trabajar por objetivos, principalmente en puestos comerciales y de ventas, siendo método único en caso de empresas que no tienen gran capacidad económica o empresas que no quieren arriesgar por los empleados pero también tienen una gran rotación y tienen que asumir costes de formación más elevados pero menos de personal, y un método complementario para empresas que tienen en cuenta a los trabajadores como un activo importante de la empresa y quieren mantenerlo. Por otro lado, la retribución por antigüedad lo ofrecen las empresas que quieren premiar la fidelidad y a sus trabajadores por la permanencia en la empresa, siendo este el principal objetivo de su retribución. La retribución por aptitudes se realiza en empresas y puestos en que requieren personas con capacidades, habilidades especiales, mucha experiencia y diferenciación, son para puestos de investigación o gran capacidad de destreza y competencias, premiando más a quien más tenga. Estos son los principales tipos de retribución básicos, aunque hay que tener en cuenta que la forma de pagar a los trabajadores no es sólo mediante un salario, sino que existen una serie de beneficios sociales o beneficios como la valoración del trabajador  que puede ofrecer la empresa a sus trabajadores. El rendimiento o productividad de los trabajadores no sólo depende del sueldo, sino que los trabajadores también tienen sus motivaciones, cada cual la suya. Por supuesto, hay que tener en cuenta que, sea cuál sea el tipo de retribución, la selección de cómo pagar a los trabajadores es mucho más compleja y es estudiada profundamente por cada empresa, teniendo en cuenta lo que necesitan, lo que tienen, lo que pueden ofrecer, las características de la empresa, del trabajador, del puesto y muchos más factores a tener en cuenta.