
Diversificar negocios consiste en crear nuevos modelos de negocio, depositar el negocio en distintas vías de manera que si una falla las demás pueden dar resultados y si todas funcionan existe más rentabilidad para la empresa. La única pega de diversificar negocios o el propio negocio es que se tienen que asignar recursos a todos estos negocios. La diversificación también puede ser ofrecer un nuevo servicio o abarcar otros negocios dentro de la empresa o local, o también puede ser ofrecer el nuevo servicio a un nuevo mercado. A añadir nuevos productos o servicios se le conoce como diversificación concéntrica. El objetivo que tienen estas dos opciones es crear nuevas oportunidades de negocio para la empresa y así favorecer su crecimiento o al menos evitar su estancamiento. La diversificación horizontal también es interesante es ciertas ocasiones, y consiste en añadir nuevos productos o servicios no relacionados para los clientes actuales. Diversificar o no, y en qué momento se debe hacer, es una estrategia que se debe estudiar, intentando conocer las consecuencias y las ventajas de esta acción para saber su asiduidad. Existen muchas empresas que se dedican exclusivamente a focalizar el negocio y asignarle todos los recursos con el objetivo de conseguir mejor rentabilidad de él, mientras que otras piensan que no se deben poner los huevos en una misma canasta. Dentro de este estudio de la conveniencia o no de diversificar los negocios hay que tener experiencia en el área, los recursos suficientes y necesarios, y dinero en efectivo ya que esta acción suele conllevar el aumento del flujo de caja saliente. Saber cuándo se debe diversificar y cuándo se debe renunciar a ello es una decisión y un conocimiento muy importante, puede ser la diferencia entre el éxito, el fracaso o una decisión sin grandes consecuencias, ya que la diversificación bien estudiada puede ser una idea muy rentable aunque conlleva siempre unos riesgos. Constantinos C.Markides, que ha estudiado muy bien el tema de la diversificación en la empresa, se plantea 6 cuestiones clave que se debe hacer una empresa al plantearse diversificar:
- Cuestión 1: ¿Qué puede hacer nuestra empresa mejor que cualquiera de sus competidores en el mercado actual?
- Cuestión 2:¿Qué activos estratégicos necesitamos para lograr el éxito en el nuevo mercado?
- Cuestión 3:¿Podemos alcanzar o mejorar a nuestros competidores en su propio juego?
- Cuestión 4:¿La diversificación desintegrará activos estratégicos que necesitan mantenerse juntos?
- Cuestión 5: Seremos unos simples jugadores en el nuevo mercado, o nos convertiremos en ganadores?
- Cuestión 6: Qué puede aprender nuestra empresa al diversificarse?¿somos lo suficientemente organizados para aprenderlo?
La idea de la diversificación es muy personal para la empresa, ya que cada cual adopta sus propias posturas al respecto, pero desde luego debe ser una idea que se debe meditar a fondo.