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Diagnóstico Empresarial I. Matriz DAFO. Elaborando nuestra «carta náutica»

«Una Carta Náutica es una representación a escala de aguas navegables y zonas terrestres adjuntas. Normalmente indicará las profundidades del agua y las alturas del terreno, naturaleza del fondo, detalles de la costa, peligros de la navegación y localización de luces y ayudas a la navegación. Se considera como un elemento esencial en la navegación náutica.»   Como ocurre en la navegación, en la Estrategia y Gestión Empresarial, antes de dar comienzo a nuestra actividad, periódicamente en plazos previstos o a tenor de circunstancias sobrevenidas sean macro-económicas, como un periodo de crisis o micro-económicas, como un descenso considerable en nuestra cartera de clientes o volumen de ventas, deberemos elaborar nuestra “Carta Náutica” Ante mencionadas circunstancias sobrevenidas, desfavorables para la organización, existen básicamente dos modelos de comportamiento que asumirá el Líder: 1- “Líder Bombero” Esta tipología de Líder, en periodos de contingencia micro o macroeconómica, continua desarrollando básicamente el mismo comportamiento empresarial, fuertemente marcado por su experiencia, que hasta el momento de la contingencia, le había funcionado. En los avatares que sufra su negocio (“fuegos”), como un “bombero” irá apagándolos, con el fin de que se extingan. En este caso, el Líder no había previsto ni las amenazas, ni las debilidades de su negocio, ni había identificado sus fortalezas y oportunidades. No había realizado ni previo al ejercicio de su actividad o durante el transcurso de la misma, un diagnóstico empresarial y en su caso elaborado los planes y proyectos empresariales, que servirían de base a su negocio, entre ellos el Plan de contingencias, para prever circunstancias adversas sobrevenidas.  El “Líder Bombero” se guía por su experiencia e intuición en los negocios. 2- “Líder estratega” Antes de dar comienzo a su actividad o incluso después, realiza un diagnóstico empresarial de su negocio, adoptando en consecuencia los planes pertinentes, entre ellos un Plan de Contingencias que le indiquen como actuar en el caso que éstas sobrevengan,  de forma racional, eficiente y rápida. Fundamentalmente el Diagnóstico empresarial abarcará cuatro perspectivas: 1.- PERSPECTIVA DEL CLIENTE: Toda organización debe estar orientada al cliente. Sin clientes la organización desaparece. Tendremos que valorar, en este sentido, información referida a los niveles de satisfacción, fidelidad, composición de la cartera, por ejemplo  y por otro lado, ventas, margen de ventas  y otra información complementaria. 2.- PERSPECTIVA FINANCIERA: Esta perspectiva abarca un adecuado análisis financiero.  Nos referimos, a  información relativa a los niveles de inversión, políticas de financiación, aplicación de beneficios y apalancamiento, por ejemplo. 3.- PERSPECTIVA ENFOCADA A PROCESOS: Toda gestión debe estar enfocada a procesos. Deberemos evaluar la eficiencia de cada uno de los procesos en los que se divide la actividad empresarial, así como la interacción de los mismos, con el fin de conocer los engranajes internos de nuestra organización. 4.-PERSPECTIVA RECURSOS HUMANOS: Mediante esta perspectiva, valoramos los Recursos Humanos, como motor fundamental de la organización, conociendo sus competencias y desempeño, para aplicar en su caso, las medidas oportunas para obtener el máximo resultado en nuestra actividad y alcanzar el máximo desarrollo personal y profesional de nuestra plantilla. Existen varias herramientas de Diagnóstico empresarial, si bien una de las más empleadas para el estudio de la situación de una empresa o de un proyecto, es la Matriz DAFO, Matriz o Análisis DOFA o FODA. Esta herramienta fue creada en la década de los setenta y produjo una revolución en el campo de la estrategia empresarial. Se fundamenta en el análisis de las fortalezas y debilidades internas de la empresa y de las amenazas y oportunidades, que el entorno ofrece a nuestra organización. Analiza la situación actual de la empresa, con el fin de fijar la estrategia oportuna, previamente analizadas, las oportunidades que la misma tiene en el mercado y las amenazas a las que se puede enfrentar. Respecto al análisis interno, analizaremos las ventajas y desventajas competitivas, partiendo del estudio de los siguientes parámetros: Producción: Analizaremos, entre otros, los siguientes indicadores: Costes de producción, Costes de no calidad y reproceso, trabajo realizado por hombre en una hora, tiempo de puesta en marcha y tiempo perdido por avería. Marketing y ventas: Líneas y gamas de productos, beneficio reportado por las inversiones efectuadas en Marketing, estudio de la composición de la cartera, fidelización y satisfacción y análisis de las cuatro P de la organización. Organización: Estilo de liderazgo, motivación, procesos de control, misión, visión y valores de la empresa. Personal: Procesos de selección y acogimiento en la empresa, rotación, planes de formación, planes de desarrollo de carrera, implicación de personal en el cumplimiento de los objetivos, clima laboral, remuneración y absentismo. Finanzas: Política de financiación, apalancamiento financiero, liquidez, rentabilidad, umbral de rentabilidad, nivel de endeudamiento y recursos disponibles. Investigación y desarrollo: Inversión en desarrollo, inversión en investigación versus beneficios obtenidos. Por lo que respecta al análisis externo, nos  referiremos al Modelo de las cinco fuerzas de Porter: Poder de negociación de los clientes. Poder de negociación de los proveedores. Amenaza de nuevos entrantes. Amenaza de productos sustitutos. Rivalidad entre los competidores. El DAFO nos permitirá una vez analizados sus parámetros aprovechar las oportunidades, contando con nuestras fortalezas, para esquivar o prever las amenazas, mejorando nuestras debilidades. Fruto del DAFO, pueden surgir cuatro tipos de estrategia: 1. Defensiva: La empresa está preparada para enfrentarse a las amenazas. 2. Ofensiva: La empresa debe adoptar estrategias de crecimiento. 3. Supervivencia: La empresa se enfrenta a amenazas externas sin contar con las fuerzas internas necesarias. 4. Reorientación: Surgen oportunidades pero se carece de las fortalezas pertinentes para alcanzarlas. Como ejemplo de un  DAFO sencillo y real, presentamos el siguiente Análisis: