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El crowdfunding, financiación colectiva para muchos proyectos

El crowdfunding, o financiación colectiva, financiación en mesa, micromecenazgo y microfinanciación colectiva, consiste en una cooperación colectiva por parte de varias personas que crean una red para conseguir dinero u otros recursos para financiar negocios, proyectos o iniciativas de otras personas o empresas. Se puede hacer para financiar negocios, campañas políticas, nacimiento de compañías y mucho más. Se basa en las donaciones de varias personas para un fin concreto que en muchas ocasiones suele ser una idea innovadora, en el concepto de que los micropagos son una buena forma para alcanzar el dinero que se necesita. Además, en la actualidad se basa mucho en el uso de las nuevas tecnologías, las redes sociales y comunidades online. También puede ser una forma de poner en común recursos para iniciar proyectos, aunque suelen ser generalmente donaciones, y especialmente inversiones. Se utiliza como forma de financiación en masa por todo tipo de sectores y proyectos, y cada vez son más los inversores interesados en los proyectos que se van a poner en marcha. Más que la posibilidad de ganar dinero con ello se trata de la satisfacción de ser artífice de que un proyecto, ya sea cultural o empresarial, salga adelante con una pequeña participación. Muchos blog, muchos músicos, mucho cine independiente, muchos proyectos innovadores o buenos para la sociedad, mucha cultura y muchos negocios no salen adelante por falta de capacidad económica, por falta de financiación. El crowdfunding es una buena forma de conseguir que se lleve a buen puerto. Especialmente se trata de proyectos que grandes inversionistas no se interesan por ellos, bien porque no les parecen lo suficientemente lucrativos o no interesan, pero sí puede interesar a inversores o donantes más pequeños, pero en más cantidad. Se obtiene además clientes potenciales por medio del boca a boca, y este es un aspecto interesante, no sólo se consigue dinero para llevar a cabo algo sino también se consigue que muchas personas hagan marketing gratuito al proyecto incluso antes de que se lleve a cabo. Actualmente ha habido un gran recorte presupuestario en el último año, de hasta un 19% en las cuentas del 2013, y muchas personas, empresas u organizaciones no saben ya dónde buscar financiación, cómo llevar adelante sus proyectos que parecen interesantes o novedosos. Antes era especialmente para artistas, pero ahora ya puede llegar a todos los sectores. Para que nos hagamos una idea, Verkami es una de las principales plataformas de crowdfunding en España y ha conseguido que el 73% de los proyectos presentados en el país consiguieran exitosamente su campaña de financiación, pero el éxito es todavía mejor si hablamos de la media de España, Europa y América, con un 75,3%. Pero estos no son los únicos datos exitosos del crowdfunding, ni tampoco es la única plataforma que existe. Existen también otras como Kickstarter, Goteo, Indiegogo y Lánzanos. Y ojo, no tienen más éxito los proyectos con un presupuesto más bajo, sino es todo lo contrario, cuanta mayor es la cantidad de dinero que se requiere mayor parece ser el éxito para alcanzar la financiación. Actualmente, incluso la ópera hecha mano de esta posibilidad, como el nuevo proyecto de la compañía LaperaÓpera. ¿Cómo funciona esto? Consiste en poner en contacto a creadores o personas que necesitan financiación con mecenas o inversores para conseguir una cantidad de tiempo determinado aportaciones económicas de personas que se implican en el proyecto porque les gusta. Estas aportaciones sólo serán efectivas si se completa la financiación al acabar este plazo. Las personas que invierten en el proyecto consiguen recompensas como una muestra del producto que se realizará, regalos, descuentos, experiencias y mucho más. Para conseguir financiación por este método hay que realizar el proyecto, o darlo a conocer, intentando buscar financiación. Debe ser una idea novedosa y atractiva, hay además que mostrarla atractiva para llamar la atención y, por supuesto, cuanto más interesante sea la recompensa más posibilidades de éxito tiene. Hay que pensar muy bien la cantidad de dinero que se necesita, realizar un buen plan de negocio o del proyecto, y pedir aquello que se necesite, no más. Eso sí, si se piensa que es un proyecto que puede interesar más a grandes inversores, es mejor intentar empezar con ellos y pensar más “a lo grande”.