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El uso eficiente del agua para mejorar el negocio

uso agua
Hasta hace un tiempo, el agua era considerada un recurso natural renovable, pero lo cierto es que gracias a las malas acciones del hombre sobre el planeta, el agua es ahora un recurso no renovable y limitado. Esto se debe principalmente a que a raíz de la deforestación, la contaminación ambiental, la sobreexplotación de los acuíferos y las gestiones y políticas mundiales ineficientes, se produjera la inevitable pérdida de equilibrio del ciclo hídrico. Aunque nos parezca mentira, hoy en diversas partes del planeta existen muchos ejemplos de territorios que pueden ser clasificados como zonas agotadas, lo que ha generado la desaparición de ecosistemas, el desplazamiento de poblaciones empobrecidas y un impacto ambiental imposible de reparar. Es por ello que en la actualidad la demanda de agua continúa en aumento, y también es por ello que cada uno de nosotros debemos realizar acciones acordes para enfrentar esta situación. En este sentido, es indispensable que utilicemos el agua de forma sabia, no sólo de manera individual en nuestros hogares, sino también a nivel empresarial. Es que en definitiva las empresas, más allá del tamaño de las mismas, tienen una obligación y un compromiso con la sociedad, que se ven plasmados en la planificación y puesta en marcha de políticas basadas en la responsabilidad social corporativa. Es aquí precisamente donde el uso eficiente del agua se vuelve un aspecto clave para el negocio, ya que debemos tener en cuenta que de esta manera no sólo estamos colaborando con la conservación de un recurso natural no renovable, sino que además podemos a través de esta política alcanzar beneficios para nuestra compañía. Lo cierto es que todas las empresas pueden beneficiarse del uso eficiente del agua, reduciendo incluso la factura de este servicio a la mitad, mediante la aplicación de medidas sencillas y económicas. Porque en realidad en ocasiones se puede llegar a pagar más dinero por los costos asociados al servicio que por el agua utilizada propiamente dicha. Utilizar menor cantidad de agua puede significar un cambio notorio a nivel de gastos en la empresa. En realidad, los expertos estiman que a través de simples acciones de bajo costo podemos llegar a ahorrar un 30% de los gastos que la empresa debe afrontar por el uso del agua. Pero eso no es todo, ya que además de las ventajas financieras, el uso eficiente del agua aporta otra serie de beneficios importantes para nuestro negocio, tales como una mejor reputación ante nuestros clientes y proveedores, generar interés en inversores, accionistas y medios de comunicación. ¿Cuánta agua utilizamos? Para poder tomar las medidas necesarias que nos permitirán alcanzar un uso eficiente del agua, debemos medir el costo real del consumo de agua que posee nuestra empresa, a través de un sencillo análisis sistemático:

  • Revisar y comparar las facturas de agua: Realizar el análisis con las facturas correspondientes a los últimos dos o tres años, y comparando el consumo anual y el costo.
  • Identificar las tendencias: A través de un análisis en el que se puedan comparar las variaciones estacionales.
  • Involucrar al personal: Un método muy utilizado es la realización de una encuesta entre los trabajadores de la empresa, en base a recolectar la opinión que poseen sobre el uso del agua en el negocio.
  • Crear un balance del consumo del agua: Se trata de una simple ecuación en la que se ponen en se enumera la cantidad de agua que sale de nuestro negocio y para qué y en dónde se utiliza.
  • Evaluación comparativa: Es conveniente llevar a cabo un ejercicio de evaluación comparativa en relación al consumo de agua que posee nuestra empresa en comparación con otras compañías competidoras.

Luego de realizar este análisis, y cuando hayamos logrado identificar la cantidad de agua que nuestra empresa utiliza y el destino que le damos, será el momento adecuado para identificar dónde podemos ahorrar agua. Siempre tengamos en cuenta que la reducción de las facturas de servicios públicos nos permitirá ahorrar dinero y nos ofrecerá una verdadera ventaja competitiva. Algunos consejos para ahorrar agua Si bien es cierto que la implementación de políticas y estrategias para lograr reducir el uso del agua en nuestra empresa puede llegar a requerir de cierta inversión, también es cierto que gracias a muchas de estas medidas podemos llegar a registrar un ahorro de hasta un 30% en los costos del agua. Además, por lo general se trata de medidas económicas y sencillas de poner en práctica. A continuación les acercamos algunas pautas para lograrlo:

  • Utilizar agua sólo cuando sea necesario. Para poder decidir cuál es la mejor forma de ahorrar agua, es imprescindible conocer la cantidad de agua que se utiliza en la empresa en base a un análisis diario o semanal, lo que nos dará una idea de la demanda real.
  • Formar a los empleados acerca de la ejecución habitual de medidas de eficiencia de agua.
  • Contar con la participación constante del personal encargado del cuidado de las instalaciones.
  • Nombrar a un miembro del personal para supervisar el uso del agua.
  • Identificar las oportunidades de minimización del uso del agua.
  • Comprar nuevos equipos que utilicen agua que sean realmente eficientes. Si bien esto puede llegar a significar una importante inversión inicial, lo cierto es que con el tiempo dará sus frutos.
  • Proteger las tuberías contra el frío y revisar regularmente que no existan fugas.
  • Investigar fuentes de agua alternativas. Se puede optar por diversas técnicas, tales como la recolección de agua de lluvia a través de un techo de captación, o la reutilización de aguas residuales provenientes de duchas y lavabos, que luego puede ser utilizada en las áreas donde no es necesaria el agua potable, como por ejemplo en la limpieza de inodoros o en el riego.
  • Colocar controles eficaces para minimizar el uso del agua.
  • Reparar goteos y fugas lo más rápidamente posible.

Si necesita más consejos, nada mejor que consultar con su proveedor de agua, que seguramente le proporcionará mayor información al respecto.