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Fiestas de empresa: por que y como organizarlas

fiestas empresariales
Las fiestas de empresa pueden ser sumamente beneficiosas para el negocio porque son sitios donde los empleados, jefes y personas relacionadas con el negocio pueden conocerse mejor, establecer alianzas, hablar y encontrarse en un entorno distendido donde no hay diferencias entre unos y otros. Las fiestas de empresa pueden ayudar a fomentar el trabajo en equipo, las relaciones entre los empleados, el compromiso con la empresa e incluso el rendimiento en el trabajo. Los trabajadores valoran su existencia, aunque hay algunos que lo pueden llegar a considerar una pérdida de tiempo o un compromiso. Y es por esto último por lo que hay planificar muy bien las fiestas empresariales. Hay que planificar con tiempo la fiesta, avisar con antelación y en sitios bien visibles, preferiblemente comunicándolo personalmente o por carta a todos los trabajadores. Los empleados han de conocer la fecha con antelación para poder organizarse bien. El mejor día puede ser un miércoles o jueves o viernes, ya que el lunes no es buen día al ser principios de semana y el fin de semana se suele destinar más a pasarlo en familia o con los amigos. Puede ser buena idea para motivar a la asistencia dejar un día libre para los empleados, preferiblemente el día siguiente al de la fiesta, aunque esto es opcional y pocas empresas lo hacen. Otra alternativa puede ser dejar que las parejas de los trabajadores asistan a la fiesta, algo que conviene valorar en el momento si es la mejor idea o no. Y los que no tengan pareja o prefieran ir acompañados de otra persona deben tener esa opción. Teniendo en cuenta el presupuesto que se cuenta, hay que organizar bien la fiesta de la empresa y reconocer dónde se realizará. Hay quien elige el mismo espacio de trabajo, e incluso algunos hacen del día laboral una fiesta, pero otros prefieren hacerlo en otro sitio en una cena o alguna fiesta temática. Hay empresas que alquilan espacios para fiestas de empresa y algunas incluso organizan actividades especiales para que los trabajadores se diviertan. Otras simplemente reservan las plazas en un restaurante y disfrutan de una velada especial con comida, bebida y música. Otras se lo llevan todo al espacio de trabajo o de día o en la noche. Esto dependerá del presupuesto y las preferencias de cada empresa. Hay quien contrata música en directo, pero también puede ser buena idea encargar un espectáculo especial. Es una idea original y que puede llegar a sorprender a los invitados. Las fiestas temáticas también están bien consideradas, aunque hay que cuidar todos los detalles y avisar a los invitados si tienen que llevar alguna vestimenta o detalle concreto, y sobre todo lo que se pueden llegar a esperar ese día. No basta con contratar los servicios de la fiesta, si se hace, hay que estar supervisando que todo esté correctamente e intentando conocer qué mejorar. Con el paso del tiempo y cuantas más fiestas se realicen se acabará conociendo cómo organizar fiestas de empresa exitosas. Algo que puede captar la atención de los allí presentes, más que la posibilidad de comer, beber, escuchar música o divertirse, pueden ser los regalos o sorteos. Lo mejor es hacer regalos, pero si el presupuesto es escaso y estos llegan a ser cutres o poco valorados conviene más comprar algo mejor y hacer un sorteo. Tanto si es una fiesta de navidad como cualquier otra en el aniversario de la empresa, una fecha especial o simplemente por qué sí hay que cuidar los detalles e intentar que los trabajadores se sientan lo más a gusto posible. Pero sobre todo hay que tener en cuenta que estas fiestas son para divertirse y llevarse bien, no para controlar a los empleados y ver si beben más o menos. No están en el trabajo, es momento para hacer una pausa y relajarse.