
La política ambiental consiste en los esfuerzos políticos que buscan conservar la naturaleza en la vida humana así como un desarrollo sostenible. A nivel de empresa, es un requisito de los sistemas de gestión ambiental en los certificados EMAS o ISO 14001. Podemos decir que la política ambiental de una empresa consiste entonces en una declaración de objetivos realizados por la empresa en que afirma tener un compromiso para mejorar su actuación con el medio ambiente y el desarrollo sostenible. Con respecto a las normas de que se trata, la ISO 14001 es la primera de las normas de la ISO 14000 y especifica los requisitos que debe contar una empresa y los requisitos a cumplir en un sistema de gestión ambiental. EMAs es una reglamentación de la Unión Europea que está relacionada con los sistemas de gestión medioambiental, concretamente la Reglamentación del Consejo Número 1836/93 del 29 de Junio de 1993. La política ambiental se basa en varios principios que son: principio de responsabilidad, principio de desarrollo sostenible, principio de prevención, principio de cooperación, principio de hacerse responsable de la contaminación creada, principio de sustitución en cuanto a sustancias peligrosas y basando todo ello en resultados de investigaciones científicas. Dentro de la política ambiental de la empresa va a ser imprescindible cumplir los requisitos mínimos legales establecidos, así como necesario aplicar y adoptar los principios del desarrollo sostenible y un sistema de valoración del ciclo de vida de los productos, desde la fase de las materias primas hasta su fase final. Entre las actuaciones más importantes que puede hacer la empresa con respecto a la política ambiental se encuentra la minimización de la producción de desechos en la empresa, así como la reducción del uso de materias primas, agua, energía y todo lo que sea necesario para la conservación de la naturaleza, siendo importante el uso de materiales reciclables siempre que sea posible. También los productos que se deben utilizar aunque no sean reciclables se deben desechar haciendo que el impacto medioambiental sea mínimo. Otra cosa que se puede hacer, en relación con otras empresas, es seleccionar empresas que traten la política ambiental o convencer a las empresas con las que se relacionan para que adopten los estándares medioambientales con los que cuenta la empresa en sí. La política ambiental consiste en la base sobre la que se apoya la gestión ambiental de la empresa, siendo un compromiso de cumplimiento y mejora ambiental por parte de la empresa, la cual va a afectar a todos los niveles de la organización que se verán comprometidos con ella y garantizarán el cumplimiento de las leyes que le involucran.