
Emprender es una posibilidad que se plantea en la actualidad, sobre todo por las dificultades de encontrar un trabajo, sin embargo, si no hay trabajos es porque los autónomos cada vez se están dando de baja en su actividad porque el negocio no les sale rentable y no son capaces de sostenerlo hasta que lleguen tiempos mejores, y las posibilidades de financiación de pequeños negocios son escasas. Sin embargo, siempre es una opción que se debe tener en cuenta si se estudia bien el proyecto. Una de las cosas que se debe tener en cuenta es que la actualidad no se ofrecen muchas posibilidades de financiación para autónomos, y aunque existen ayudas para iniciar la actividad estas ayudas llegan tarde. Por eso mismo, para emprender hay que tener el dinero que se necesita, o iniciar una actividad que no requiere de grandes recursos, como emprender en actividades desde casa. Otra de las cuestiones que más preocupan es que en nuestro país no existe una cultura emprendedora, por lo que si una persona le dice a la familia que va a ser autónomo lo más probable es que lo miren mal. En España, la cultura se centra en ser trabajador por cuenta ajena o ser funcionario. La posibilidad más importante que existe como autónomo es seguir el negocio familiar. Sin embargo, cada día nuevos autónomos inician su actividad contra corriente y con mucha ilusión. Se debe fomentar una cultura emprendedora. Otra dificultad a la que se enfrentan los autónomos son los grandes papeleos y trámites que son necesarios para iniciar la actividad, y mucho más para montar una empresa, son necesarios muchos papeles y muchos pagos antes de poder empezar el negocio. Mientras el negocio no se empieza se está perdiendo dinero, sobre todo si se alquila un local, y mucho tiempo en trámites que se podría dedicar a otro tiempo. Además de eso, hay que pagar muchos impuestos, hacer la declaración del iva, pagar la cuota de autónomos y otros gastos de actividad. Ser autónomo siempre es un riesgo, y si la actividad va mal siempre se habrá perdido dinero. Existe la posibilidad de emprender un negocio con pocos recursos y poco riesgo, o estar en una situación de no iniciar la actividad hasta encontrar los clientes necesarios, pero esto en ocasiones hace que se pierdan oportunidades importantes. Si un negocio no funciona, el emprendedor es el que pierde todo. Por eso mismo, hay que planificar muy bien todo antes de iniciar la actividad y empezar con los trámites. Emprender es arriesgar, es jugarlo todo a la carta de las ilusiones que se tiene en un negocio propio, por eso mismo si sale bien es tan satisfactorio para quien lo hace, y por eso muchos autónomos no se arrepienten de su decisión.