
Sin lugar a dudas, los profundos cambios que se han producido en la sociedad a nivel mundial en las últimas décadas, ha generado la necesidad imperiosa de repasar y modificar algunos aspectos relacionados con las empresas. En este sentido, la llamada Responsabilidad Social Empresaria se ha convertido en uno de los puntos clave, que ninguna compañía puede pasar por alto, incluso aquellas oriundas de países en los cuales aún no se ha difundido con precisión y exactitud los alcances de esta área. Tal es el caso de Argentina, en donde aún no existe una conciencia empresarial ni un marco legal acorde que responda a los requerimientos actuales en lo que respecta a la Responsabilidad Social. Lo cierto es que gracias a las posibilidades actuales, en la Argentina cada vez son más las pequeñas y medianas empresas nuevas que inician su actividad en el país, por lo que el diseño y posterior ejecución de una contención legal acorde en relación a la Responsabilidad Social que deben asumir dichas compañías se ha transformado en una necesidad inmediata e imperiosa. Claro está que desde hace años se han presentado en el Congreso Nacional diversos proyectos e iniciativas al respecto, pero hasta el momento no se ha podido sancionar una ley acorde. De todas formas, desde el año 2005 se ha instalado el debate entre los Diputados nacionales que evalúan la necesidad y la forma que debería tener la ley nacional que permita dar un marco jurídico a la Responsabilidad Social Empresaria en la Argentina. En este aspecto, si repasamos los antecedentes podemos mencionar que precisamente en el 2005 ingresó el primer proyecto de ley sobre este tema en la Cámara de Diputados. No obstante, a pesar de haber transcurrido ya siete años, aún no se ha logrado sancionar esta norma legal. Mientras tanto, el debate es realmente intenso al respecto, no sólo entre los legisladores nacionales, sino que también la discusión se ha instaurado entre los propios interesados del sector empresarial, que como tales requieren que una ley que regule la RSE en el país sea prontamente aprobada. Desde aquel lejano 2005 en que se presentó formalmente el primer proyecto de ley hasta la actualidad, han ingresado a la Cámara de Diputados un total de cinco proyectos de ley que aguardan ser tratados, y a los cuales se suma un proyecto presentado en el Senado. Incluso, algunas provincias del país, como es el caso de la Provincia de Buenos Aires, se encuentran diseñando sus propios proyectos al respecto. Precisamente en el mes de abril de este año, el diputado provincial Martín Cosentino presentó un proyecto de ley de Responsabilidad Social Empresaria exclusivo para la Provincia de Buenos Aires, que entre otras cosas incluye la creación de un Registro de Información sobre Responsabilidad Social Empresaria de la Provincia, e intenta instituir el Premio Anual de Responsabilidad Social “Juntos es Mejor”, a través del cual se galardonará a aquellas empresas que lleven adelante operaciones relacionas a la RSE, y sobre todo que protejan el medio ambiente social. Si le interesa conocer el proyecto de ley puede encontrarlo en este enlace. Otro ejemplo contundente de lo mencionado es lo que sucede actualmente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde desde el año 2008 se ha presentado ante la legislatura porteña un proyecto de ley conocido como Ley Nº 2594 de Balance de Responsabilidad Social y Ambiental (BRSA), que aún espera ser reglamentado por el Poder Ejecutivo. Básicamente, esta nueva ley establece que cada una de las empresas que se desenvuelven en la Ciudad de Buenos Aires se desarrollen en base a los comportamientos sociales y ambientalmente responsables que son establecidos por el marco legal. No obstante, a pesar de las iniciativas que se están llevando a cabo en las distintas provincias argentinas, lo cierto es que se hace indispensable el tratamiento de la problemática a nivel nacional. RSE hoy en Argentina Más allá del hecho que hasta el momento no haya sido sancionada ninguna ley de Responsabilidad Social Empresaria en la Argentina, lo cierto es que de todas formas esta área está siendo regulada a través de la Ley de Régimen Laboral, Nº 25.877, la cual puntualmente en su artículo 25 establece que las empresas nacionales y extranjeras que se desenvuelven en el país, y que mantengan activos más de 300 puestos de trabajo, deben elaborar un balance social anual de manera obligatoria. Ahora bien, ¿qué es un balance social? Básicamente se trata de un informe o reporte que la empresa realiza en relación a su actividad de responsabilidad social, es decir que incluya el análisis del impacto social, ambiental y económico que está generando el desenvolvimiento de la compañía en el país. Por ende, este informe debe incluir los tres factores primordiales, es decir empleados, comunidad y medio ambiente, que en definitiva son los pilares de la RSE. No obstante, para que una empresa asuma el compromiso de llevar a cabo las prácticas corporativas adecuadas a lo que en realidad debe ser una verdadera responsabilidad social, deben en principio haber firmado su adhesión al Pacto Global en Argentina, que si bien en la actualidad son muchas, lo cierto es que aún existen gran cantidad de PyMEs que no responden a esta reglamentación. Por otra parte, como hemos podido observar la vieja ley no incluye a microempresas y emprendimientos comerciales que cuenten con menos de 300 empleados, dejando al margen a un importante número de pequeñas empresas que en definitiva también deberían adecuar sus actividades comerciales a la RSE. Esa es una de las principales claves en lo que respecta a la necesidad imperiosa de una ley que regule las actividades de la RSE en Argentina a nivel nacional. Pero lo cierto es que la RSE debería ser voluntaria y no obligada, y así lo entienden la mayoría de los especialistas en la materia, que aseguran que no es necesaria una ley de RSE ya que existen diversas normas jurídicas que abarcan las problemáticas del área. En este sentido, el Presidente del Instituto Argentino de RSE, Luis Ulla, que permanentemente destaca su rechazo a la creación de una ley que obligue a cumplir con normas relacionadas a la RSE en el país, mencionó al respecto: “La ley es innecesaria y hasta contraproducente, y parte de una mala interpretación de qué es la RSE, que es una forma de gestionar las empresas que cuidan el medio ambiente, la comunidad en la que están insertas y a los propios trabajadores y todo esto ya está legislado. El trato digno a los obreros está en las normas laborales. El cuidado de los recursos naturales en la leyes ambientales”. Sin lugar a dudas, la discusión se extenderá aún por más tiempo, tanto entre los legisladores como entre los empresarios, pero finalmente llegará el hallazgo de un equilibrio adecuado, que permita regular las actividades relacionadas a la RSE, y a través de ello sancionar o premiar el comportamiento de las empresas.