
A lo largo de las carreras y capacitaciones en temas de economía y finanzas, suele generarse una confusión en algunos de los estudiosos de estas disciplinas, en lo referente a la caracterización de estas tres significaciones. Es muy importante que el empresario, cuente con una clara noción de estos tres importantes conceptos de las finanzas, no solo porque cada uno de ellos encierra un significado diferente, sino porque comprenderlos adecuadamente, puede significar la diferencia entre tomar una acertada o inadecuada decisión en el negocio, que evidentemente podría repercutir de una manera negativa e indeseable. La liquidez, es un término que coloquialmente se utiliza, y con mucho mayor frecuencia manejado en el lenguaje de los negocios, porque está vinculado en esencia al dinero y a los bienes o instrumentos que lo representan, como los títulos de crédito (pagaré, letra de cambio, acciones) y los cheques. De manera que hablar de liquidez, es referirse al dinero y a la inmediata disponibilidad de este. La solvencia, está referida a la estabilidad económica en las personas o en los negocios. De tal forma que una empresa podría estar falta de liquidez, pero tener solvencia económica. Un caso muy frecuente que ilustra esta diferenciación, es cuando ciertas corporaciones se enfrentan a problemas de pago a proveedores, de impuestos y en el peor de los casos de salarios, pero esta situación es momentánea o transitoria y ocasionada por una inadecuada administración del capital de trabajo. Posiblemente en este supuesto la empresa invirtió demasiado en inventarios, elevó su periodo de cobro a clientes o invirtió una parte importante de su circulante en activos fijos, ocasionando una carencia en el efectivo inmediato, pero que no pone en riesgo al negocio, por tener suficientes inversiones que respaldan su endeudamiento a corto o largo plazo. Rentabilidad. Es el término financiero por excelencia. Todas las empresas buscan ser rentables, es decir; obtener un amplio margen de ganancia, pero en ciertos casos, esta rentabilidad puede estar asociada a una baja o a una muy alta liquidez. Un ejemplo de negocios que pueden ser altamente rentables y con elevada liquidez son los supermercados; cobran 100% de contado y pagan a sus proveedores con holgados periodos de tiempo en ocasiones hasta de varias semanas de atraso. El empresario debe conocer con precisión cada uno de los términos referidos, para poder estar en posibilidad de interpretar adecuadamente los estados financieros de su negocio; flujos de caja, balance general, estado de resultados etc. Que le brindarán de esa enfocada interpretación, los elementos y argumentos para que pueda tomar decisiones acertadas y fundamentadas en la información financiera, que probada y científicamente está considerada como la herramienta de gestión financiera imprescindible en toda empresa o corporación de negocios.