A la hora de planificar las labores de marketing, sobre todo si se trata de marketing relacional aunque en cualquier estrategia, es muy importante tener en cuenta todos los aspectos que se van a trabajar y tener en cuenta. Muchas empresas, en esa búsqueda de nuevas formas de llegar a sus clientes han encontrado una estrategia sumamente efectiva, sobre todo si se trata de servicios, y son los descuentos permanentes. La estrategia de los descuentos permanentes es que no lo parezcan, que simplemente aparenten una promoción limitada en el tiempo que incite a los potenciales clientes a dar el paso de la compra. La estrategia inicial es sencilla, consiste en elegir el precio que se quiere cobrar por ese servicio o producto y ofrecer un precio superior. De esta manera, se podrán hacer promociones desde el 40 hasta el 60% hasta llegar al precio que realmente se pensaba comprar por ello. ¿Por qué es efectivo el marketing con descuentos permanentes? Porque el cliente siente que se lleva algo de superior precio a un precio muy inferior, porque encuentra una sensación de ahorro y además siente que se lleva algo más valioso. Un mayor precio le da más valor a un producto o servicio, pero es que si ese precio mayor tiene un alto descuento, la persona siente que se lleva algo muy valioso a un precio reducido. Esta es la sensación que quieren dar los sistemas de descuentos permanentes. La estrategia puede continuar ofreciendo un tiempo limitado tras el que ya no se ofrecería este descuento, esto es sencillo ya que se puede poner oferta hasta fin de mes, oferta de fin de temporada, oferta hasta x día, becas de duración limitada, etc. Recalcando el sistema de becas, esta es una estrategia de marketing que ofrecen muchas empresas de formación y estudios que ofrecen un sistema de becas propio de hasta un 60%, haciendo que el cliente que acceda a ellas se sienta con la exclusividad de ser de los pocos que acceden a este ahorro y que compran un buen producto o servicio que generalmente es más caro. El tiempo limitado es ideal para los clientes indecisos, que al ver que pueden acceder a este descuento lo dejan pasar durante el tiempo. Es un sistema de marketing que de manera enmascarada hacen muchas empresas, ofreciendo algo por el precio que querían tener tras la «rebaja» de un 40%, 50%, 60% o incluso más, haciendo que los clientes se sientan únicos, motivados hacia la compra, que sienten que compran algo a buen precio y que finalmente queden contentos con la empresa que les ha podido dar la oportunidad de acceder a ello. Este plan de marketing no es efectivo en muchos sectores, como los productos, sobre todo si son conocidos, porque de nada sirve ofrecer a 1 euro tras la rebaja un producto que en otro sitio lo ofrecen a 99 céntimos sin rebaja.