
¿Qué Necesitas?
Patrón de referencia
El calibrado realiza un proceso comparativo entre un valor de referencia establecido y lo que debería indicar el instrumento de medición. En estos casos la palabra clave es la precisión, ya que sin ella no sería posible determinar algún defecto potencial en la unidad que se revisa. Estos instrumentos deben ser certificados para su buen funcionamiento. Un laboratorio de calibración debe registrar con eficiencia la trazabilidad y la capacidad de medida con personal calificado. Los parámetros a considerar en toda calibración son los siguientes: error de medición, desviación, error relativo, error sistemático, corrección y ajuste. También se tienen en consideración el patrón primario, patrón secundario, patrón de referencia, patrón de trabajo y patrón de medida. La metrología es una aliada habitual en los sectores de la industria del automóvil, de los laboratorios farmacéuticos, la construcción y en nuestra vida diaria.
Precisión
A veces, necesitamos aparatos no muy complejos que nos suministren información precisa sobre lo que ocurre a nuestro alrededor. Por ejemplo, existen los termómetros para conocer la temperatura corporal, los barómetros, para informar sobre la presión atmosférica, o los medidores de campos eléctricos, que revelan información sobre las tormentas eléctricas. La historia está repleta de casos en los que las mediciones tuvieron un papel fundamental. Han acompañado al hombre desde su aparición en la Tierra, controlando las estaciones según la aparición de la Luna, contando pasos al caminar o contando brazadas, o cuando se utilizaban las palmas de las manos para medir una distancia. Cada mañana salimos a la calle y vemos que muchas de las cosas que nos rodean tienen cualidades que se pueden medir, lo que conlleva a una jerarquización de esas cosas que nos afectan como humanos. El resultado de esas medidas es una aproximación máxima del instrumento en relación a lo que se está evaluando.
Campos de aplicación
Son varios los campos en los que la metrología tiene una mayor incidencia: metrología legal, industrial y científica. Sobre la primera aplicación se puede destacar que el término se encuentra relacionado con requerimientos técnicos obligatorios. Un servicio de metrología legal sirve para garantizar las medidas correctas en diferentes campos de interés público, como el comercio, la salud, la seguridad y el medio ambiente. En estos casos, el alcance de la metrología está sujeto a las reglamentaciones nacionales de cada país. Por ejemplo, esto tiene que ver con que una nación utilice los kilogramos como forma legal de medir el peso, mientras que la norma en otros países es el empleo de las libras. La metrología industrial se centra en las medidas que se relacionan con la producción y el control de la calidad de los productos o servicios. En esa rama, las personas tienen la posibilidad de enviar el instrumento o equipo de medición al exterior para que sea verificado. Por último, está la rama científica, que se ocupa de los problemas de las unidades de medidas, de los errores y de los sistemas de unidades o la conversión de las unidades. Es decir, todas las cosas que nos rodean y que pueden ser medidas, o pasar por un proceso de calibración, tienen que ver con la metrología, cuyo mayor logro es determinar si una herramienta o un equipo de trabajo está funcionando correctamente. Por consiguiente, está claro que esta especialidad es más popular de lo que muchas personas pueden pensar. Sin la metrología no podríamos contar con pesas o balanzas bien ajustadas, con equipos de topografía bien calibrados, ni con los pequeños termómetros de uso doméstico, en cuyos casos se refleja un valor medible que habla sobre nuestra cotidianidad y las actividades humanas para seguir hacia adelante.