
Prevenir el robo de identidad es a veces complicado, y es que hay cosas que se nos escapan y de repente ya hay alguien suplantando nuestra identidad, pero no es imposible y por ello hay que tomar una serie de medidas, aunque se pueda pensar que quién va a querer robar la identidad. Si eres vulnerable en tu identidad cualquiera puede ir a por ti, y lo peor es que lo haya alguien que delinca. Existen muchas formas de prevenir esto, o muchos consejos que se deben tener en cuenta, pero lo importante es tener todos los papeles en regla y disponibles, bien guardados y que no sea fácil a la gente acceder a ello. Consigo se debe llevar el dni y los documentos que puedan ser necesarios en ese momento, pero no más que eso. Y mucho menos llevar el número de seguridad social o seguro social de manera que alguien pueda hacerse con él. Hay que proteger los datos propios de cualquier acceso que no sea el propio, especialmente si se comparte piso. Si se cambia de dirección se debe comunicar a donde sea posible. Y siempre hay que ver si todas las cartas llegan o si hay alguna que misteriosamente ha desaparecido. También es buena idea tener un apartado de correo para coger las cartas en la oficina de correos y así evitar que alguien intercepte las cartas. A la hora de recibir llamadas de telemarketing o confirmar identidad se debe comprobar que se habla realmente con quien es, pero mucho mejor decir que se llamará personalmente así sí se asegura de hablar con quien corresponde. No se deben dar por teléfono datos que no son necesarios para lo que se quiera, y mucho menos dar contraseñas o claves “para confirmar”. Se debe proteger también la identidad en Internet, instalando antivirus y firewall y evitando que cualquiera pueda acceder a los propios datos. Se debe actualizar el navegador, el buscador y los programas para una mayor seguridad. No hay que entrar en páginas no seguras o de las que se desconfíe, y mucho menos si se pide datos y se ha accedido a ellas desde alguna red social o correo electrónico. Se debe poner el nombre en las listas de No llamar y eliminar de las listas públicas en las que es mejor no salir para evitar que otras personas utilicen esta identidad. De vez en cuando y frecuentemente se deben actualizar las contraseñas para evitar que alguien las haya descubierto o haya dado con ellas. Si se ha entrado en algún sitio sospechoso se debe cambiar al momento. La documentación que no se necesita debe ser destruida, hay que prevenir el acceso de las personas, pero bien destruida. Mucho mejor con una trituradora, en caso de no poder quemándola después de cortarla o cortarla en trozos tan pequeños que no se pueda acceder a ellos. Puede ayudar pedir un informe de crédito al menos una vez al año para comprobar que toda la información está correcta. Hay que revisar también los extractos de la cuenta bancaria para evitar que haya transacciones que no se han realizado. No se debe compartir con nadie información financiera. Si te desaparece algún tipo de documentación o algo importante, aunque no tengas ganas de hacerlo, debes denunciar a la policía para que quede constancia de ello. Muchas personas han tenido problemas por no denunciar. Si se trata de una persona mayor que vive consigo o una persona que no conoce los trámites, intenta ayudarle y realizar estas acciones evitando que algún ser querido caiga en ello.