Saltar al contenido

Qué es la administración estratégica

Para poder adentrarnos en lo qué es la administración estratégica, debemos comenzar diciendo que no existe una única definición para la misma, sino que, podemos describirla y explicarla de varias maneras. Entre dichas definiciones encontramos las siguientes:

  • Ciencia de elaborar, poner en práctica y supervisar las decisiones tomadas, con la ayuda de las acciones que realizan las empresas para lograr sus objetivos.
  • Plan estratégico que oficie de guía en el panorama económico mundial.
  • “Proceso que se sigue para asegurar de que una organización posea estrategia organizacional y se beneficie de su uso.” – Certo
  • “Proceso de administración que entraña a que la organización prepare planes estratégicos y, después, actúe conforme a ellos.” – Stoner

Olvidémonos ahora de las formalidades que una definición implica y concentrémonos en el concepto. Extraigamos lo que estas definiciones tienen en común y elaboremos una idea que nos permita comprender exactamente qué es la administración estratégica. Lo que podemos afirmar a ciencia cierta, es que la administración estratégica comprende una planificación orientada a cumplir los objetivos de la organización. Se trata de ver cómo puedo alcanzar las metas que me he planteado, mediante la implementación de ciertas medidas muy bien elaboradas y supervisadas en el proceso.

Índice

¿Qué es la administración estratégica y cómo llega a nuestros días?

Para saber qué es la administración estratégica y cómo es que hace su aparición en nuestros días, debemos remontarnos a la Revolución Industrial, momento en el que comienzan las organizaciones empresariales complejas. Sin embargo, ya había sido aplicada a las estrategias militares, dónde se la empleó para combatir al enemigo. Si trasladamos esto a nuestros días y al ámbito empresarial, el enemigo es, definitivamente, la competencia. Es decir, que la administración estratégica es un conjunto de planes de acción orientados a destruir, o minimizar, la competencia para ser los líderes del mercado. Empero, no fue hasta los años 50 que los economistas se percataron de que ese arte de combate resultaría muy útil a nivel empresarial, ya que la compañía necesita ser encaminada hacia un determinado lugar para poder lograr la expansión que anhela. A su vez, se comenzó a tomar conciencia de la necesidad de lograr un crecimiento prolijo, ordenado y  que reporte ganancias. Fue entonces que este nuevo concepto de planificación comenzó a adquirir vuelo y el método hasta ese momento empleado, fue descartado por sus escasos beneficios. Sorprendentemente, los primeros trabajos de administración estratégica  se registraron en los años 70, para finalmente consolidarse en los 80, década que fue testigo de los primeros trabajos de  Planificación Estratégica. Más avanzado el Siglo XX, teóricos del porte de Drucker, Porter y Ries, fueron los pioneros en elaborar una teoría en la cuál podía basarse la administración estratégica y lograr entonces, los mejores resultados.

¿Cuáles son sus objetivos?

Una organización está basada en objetivos a cumplir. Existen dos caminos para lograrlos: la intuición y la estrategia. El primero, como es de suponer, implica un exceso de riesgos y no dirige nuestras acciones hacia ningún lugar en concreto. Por ello surge la necesidad de elaborar una estrategia basada en las metas para poder ponerles un tiempo de realización y una forma de medición y de esta manera conocer si ha sido exitosa o si ha fracasado. Ser un buen estratega significa elaborar y evaluar planes y estrategias absolutamente todo el tiempo. De este modo, se obtiene un feedback permanente de lo que se está implementando y su impacto en el destinatario de las acciones que se realizan. Lograr que una empresa sea exitosa depende en su mayor parte de que los productos y servicios que se ofrezcan a través de la misma, alcancen un nivel de competitividad mundial, para lo cual es inevitable sentarse a elaborar una estrategia eficiente y un plan de acción eficaz.