
Puede llegar un momento en que la empresa decida vender todos los productos por obras, cambio de local, fuerza mayor, cambio de rama de comercio o modificación sustancial en la orientación de negocio o cese total o parcial de la actividad. Tanto si es por el cierre de la empresa como por cualquier otra razón, se pueden vender los productos ya existentes en la tienda (no comprar más sólo para vender aprovechando el momento) a unos precios más económicos, y siempre indicando la causa de la liquidación. No se puede mantener una liquidación por más de 3 meses, a menos que sea total en que se puede vender de liquidación hasta 1 año. No se podrá hacer más de una liquidación en el mismo establecimiento, a menos de decisión judicial o administrativa. Las liquidaciones tienen sus propias limitaciones, entre las que está no ejercer la actividad comercial en la misma localidad con productos similares a los de liquidación en los 3 años siguientes a la finalización de la venta cuando se trate de cambio de ramo, cese total o parcial, por lo que no vale “engañar” creando una liquidación que no tendría por qué darse. Antes que llegar a la liquidación se pueden hacer muchas cosas, y lo mejor es intentar llevar adelante el negocio, pero en caso de que haya que llegar a ella se debe hacer de la mejor manera, lo que incluye elegir muy bien qué precios se deben aplicar. Además, es necesario avisar con 15 días de antelación a la consejería competente en materia de comercio indicando la causa, fecha de comienzo, duración y mercancías. Un descuento del 50% es lo más frecuente, y atractivo para los clientes, pero hay quienes prefieren indicar un descuento inferior o superior. También puede ser una estrategia empezar por un descuento bajo (un 20 o 30%) para ir aumentándolo conforme se van vendiendo productos y quedando otros. Hay muchas personas que aprovechan las liquidaciones para comprar a buen precio, e incluso hay otras que hacen negocio comprando en las liquidaciones para vender después a un precio superior. Lo cierto es que la liquidación es la última opción de la empresa, pero permite liberarse del stock y ganar algo de dinero antes de tener que echar el cierre definitivo, o sacar algo de dinero de unos productos que (en caso de no ser liquidación por cierre) tendrían que tirarse o serían más caros de trasladar o almacenar.